La primera regla de la vida es nunca dejar sola a mamá


Ella estuvo cuando la necesitaste y ella te necesita ahora

 




  Sin dudas tu madre es quien más te va a querer en la vida … su amor por ti no se puede superar por nada en el mundo, pues el vínculo que tiene contigo se creó en su vientre, antes de que pudiera verte el rostro y abrazarte. Un amor que siempre aumenta, se multiplica y que nunca se agota.

   No puede haber nada más triste en la vida que ver a una madre que ha luchado tanto por sus hijos llorar porque ellos la dejaron sola en su vejez. 

 Una mujer que dedicó toda su vida a la crianza de sus hijos, y se esforzó cada día para que no les falte nada… y que al llegar a la vejez, el tiempo cuando es más vulnerable por dictado de la naturaleza, no cuenta con ninguno de sus hijos a su lado para cuidar de ella.

Ella lo hizo todo por ti


  Puede que de un modo egoísta argumentes que nunca le pediste que hiciera ninguna de todas esas cosas, que te tuvo porque quiso y te tuvo que cuidar simplemente porque era su “obligación”… ¡y ese es un pensamiento totalmente egoísta e inmaduro!  


  Fue tu madre quien te tuvo en su interior y te cuidó más que nadie para darte la vida… Sacrificó todo por ti y es la única en el mundo que sin dudarlo un instante daría la vida por ti si fuera necesario… ¿y aún así llegarías a ser tan cobarde de albergar tales pensamientos egoístas como ese? ¡Seguramente no!  

 

  Cuando llegue el día en que tu madre sea la que te necesita, sean cuáles sean las circunstancias y el momento que sea, lo mínimo que debes hacer es estar junto a ella. 


 Tiéndele tu mano siempre que lo necesite y sin importar nada más, porque recuerda que ella es la persona más importante en tu corazón o al menos..., así debería ser.

 Si tienes hijos, es muy probable que en un futuro esperes que cuando ellos sean adultos y ya tengan sus vidas hechas,  quieras que en el futuro, cuando ya tengan sus vidas hechas, te sigan amando con la misma devoción con la que lo hacen ahora, ¿no es así? 

 Pues entonces recuerda que tu madre guarda esos mismos anhelos por ti desde el día en que naciste… ¡y merece que le devuelvas todo ese amor!

 

No te vayas, mamá


  Si eres adulto y aún tienes a tu mamá, puede que sin darte cuenta poseas el tesoro más grande que te puedas imaginar.

  Siempre debes tener presente que su corazón es de oro y que el día que no esté a tu lado, querrás darlo todo solo por estar 5 minutos más con ella, por escucharle, por abrazarla, y sentir su cariño una vez más. 

 La tuviste toda tu vida, pudiste escucharla cada día mientras crecías y que de repente no puedas tener su calidez en tu vida es de los golpes más duros que podrías recibir.

  Así que, ahora que aun cuentas con ella y tienes la oportunidad de abrazarla y disfrutar de su presencia, no la pongas triste, no la hagas enfadar… y jamás hagas algo que le rompa el corazón. 

 Ella intentó hacerte reír  siempre que estabas triste, consolaba tus lágrimas y es quien te amará por encima de todo y a pesar de cualquier error que hayas podido cometer en tu vida.

Cuídala y protégela siempre


 Recuerda cuidar a tu madre y protegerla. Valora como el oro a cada minuto que pases con ella, pues nunca sabes cuándo será el día en que ya no la tengas contigo a tu lado. No esperes a que ya no esté para darte cuenta de todo su valor. 


  Deja que disfrute de ti en esta vida y no esperes a extrañarla para pensar en todo lo que te hubiera gustado decirle y ya no tendrás oportunidad. La vida mañana no es segura para nadie, así que dile cuánto la amas en cada momento, cada día que puedas.     

  Y sobre todo, respeta a tu madre, porque a una madre hay que respetarla siempre. Tu madre es quien mejor te conoce de este mundo y es la que siempre sabrá cómo darte paz y animarte cuando la necesites. 

  Su cariño es algo que siempre necesitarás, porque cuando ella te rodea en sus brazos vuelves a ser automáticamente en el niño o niña que ella vio crecer y que se sentía a salvo de todo cuando ella estaba.

  Ojalá los momentos junto a tu madre pudieran ser eternos y que cada sonrisa los uniera para siempre. Tu madre es la única que siempre te apoyará cuando todo el mundo deje de hacerlo, porque ella te dará todo su amor y jamás te decepcionará y te perdonará siempre, aunque nadie más lo haga.  


Tu madre siempre debe ser tu prioridad mientras tengas la suerte de tenerla contigo… pues es una estrella fugaz, y tienes que disfrutarla mientras brilla para ti, porque cuando se apague, no volverás verla de nuevo jamás.

Fuente: Etapa infantil

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