Vincularse a una persona que no sabe lo que quiere es como jugar con fuego
Relacionarse con una persona así, a quien guía sus inseguridades es el equivalente a andar por una cornisa de las relaciones.
Mantener una relación con alguien que no es capaz de sentir amor por sí mismo, ya que las dudas, vacíos, miedos e inseguridades lo condicionan y estancan, es tan arriesgado como saltar sin paracaídas a un abismo.
Y es que alguien que no sabe lo que quiere ni cómo completar y llenar sus vacíos, hará de ese amor un juego inmaduro del que participará sin ninguna responsabilidad ni estabilidad.
Cuando iniciamos una relación, lo normal es buscar ser felices, construir un vínculo con nuestros compañeros de vida a largo plazo y un proyecto en común con otra persona capaz de realizarlo con nosotros.
Pero lamentablemente la realidad muchas veces no es tan reluciente como esperábamos.
La doctora Sandra Murray, especialista en el área de psicología de la Universidad de Búfalo ha centrado sus estudios sobre relaciones de pareja, y afirma que aquellas parejas que tienen una marcada inseguridad personal llegan a comportarse, aun sin pretenderlo, como saboteadores psicológicos en la relación.
Lo que es más, cuando alguien parece nunca saber bien qué es lo que quiere acaba nutriendo el compromiso original de un sinfín de dudas que distorsiona la realidad de la pareja.
Según la psicóloga, son las mujeres las que muchas veces inician este tipo de relaciones con hombres inseguros luego de salir de otras con una pareja narcisista, debido al atractivo de conocer a una persona que no es ti tan tormentosa ni tan compleja. Incluso esa timidez falibilidad o inseguridad puede darle una mirada más cercana y sensible.
Pero mientras corre el tiempo y la convivencia, en el día a día empiezan a descubrir aristas algo molestas. Se trata de las puntas de un iceberg que parece surgir de repente y contra las que se choca con las emociones, creando un sentimiento frío y distante.
Consecuencias de relacionarse con alguien inseguro
Al principio, una cierta inseguridad puede parecer atractiva, dulce y hasta entrañable, esas personas que se muestran vulnerables, y admiten sus dudas y límites.
Incluso existen quienes se enamoran justamente de esos aspectos, creyendo que, como salvadores, podrán cambiarlos y generar suficiente seguridad y templanza para compensar en un equilibrio todos esos miedos de la otra persona.
Sin embargo, esto puede ser un grave error. En una pareja nadie debe ser salvador ni héroe de la otra persona, nadie puede salvar de las bajas autoestimas ni hacer magia con los temores olas actitudes que la otra persona se impone a sí misma y que la condicionan en su vida cotidiana.
Y la razón para esto es muy sencilla, y es que no se puede cambiar a la otra persona de un día para otro.
De hecho, la mayoría de las veces es imposible hacerlo, esa es una ardua tarea de la que solo la misma persona es capaz de llevar a cabo...y responsable de hacerlo, por otra parte. Superar esa inmadurez emocional debe ser un proyecto de esa persona y de nadie más.
Sin embargo, vincularse con alguien inseguro provoca muchas consecuencias de las que en ocasiones es difícil lidiar.
La inseguridad personal y sus consecuencias
Terminar con una relación con una persona narcisista para iniciar otra con alguien inseguro, aunque pueda parecer un cambio rotundo de rumbo, no es más que una continuidad, ya que al fin y al cabo ambos comportamientos son muy similares y producen heridas también similares.
Las personas inseguras necesitan todo el tiempo sentirse aprobadas y que se las reconozca, ya que tienen una autoestima baja que necesita ayuda externa todo el tiempo para mantenerse a flote.
Del mismo modo que los narcisistas tienen una autoestima desbordada...pero que también necesita una aprobación y reconocimiento constante.
Además los altibajos emocionales y los cambios constan de intereses y opiniones desgasta toda relación. Así, no parece buena idea regalar nuestro corazón a alguien inseguro que no sabrá cómo cuidarlo, y que un día tendrá interés en él y al otro no.
Muchas veces esa inseguridad también se transforma en una necesidad de control y desconfianza, a dudar de la pareja, y a temer todo el tiempo por el abandono o la traición. Y de esas inseguridades surge una necesidad de controlar a la pareja todo el tiempo.
¿Qué hacer con una persona insegura?
Desde luego, hay distintos grados de inseguridad personal, y lo importante es que quienes sean conscientes de que es un problema intenten manejarla y superarla.
Aunque muchas veces quienes la padecen son incapaces de verlo o asumirlo, y perjudican a todos aquellos que se acerquen a ellos.
Así, lo primero que se debe hacer si estamos en pareja con alguien inseguro, es hacer que sea consciente de su responsabilidad en esta actitud y que vea que ese comportamiento genera la falta de satisfacción en la pareja.
Al mismo tiempo, hay que evitar que nuestro proyecto de vida se altere por las inseguridades o necesidades del otro.
No tenemos que perder el tiempo levantando bajas autoestimas ni consintiendo controles emocionales, o inseguridades donde un día somos adorados y al otro no representamos ningún interés para la otra persona.
Es simple, relacionarse con alguien que no sabe lo que quiere tarde o temprano hará que nuestro propio equilibrio emocional se desmorone.
Debemos recordar que en una relación saludable no existe lugar para las inseguridades constantes ni para un "te quiero" a medias, hoy sí y mañana no sé. Por eso, debemos buscar un amor completo, valiente y enriquecedor con quien se pueda tener un proyecto en común sin límite de tiempo.
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Fuente: La mente es maravillosa