educación emocional
Psicología
REFLEXIONES
Entérate por qué un manipulador narcisista nunca se disculpa
Por qué un manipulador narcisista perverso nunca se disculpa. Algunas personas simplemente no pueden lidiar con la realidad.
Si alguna vez has tenido que lidiar con un manipulador o un pervertido narcisista, probablemente hayas notado algo muy confuso con ellos. Aunque solo pueden ver el daño que se hacen el uno al otro, nunca se ven a sí mismos como agresores.
Independientemente de la evidencia de su mala conducta que los traiga, muchos agresores argumentarán que “esto ha sido merecido”. O cualquier otra justificación ridícula. Hasta el momento de su muerte.
Uno puede preguntarse cómo es posible que un ser humano abusivo y horrible no pueda darse cuenta del daño que está haciendo a su alrededor. Como era de esperar, realmente hay una razón psicológica para ello.
Nadie quiere considerarse una mala persona.
La razón más simple de este estado de cosas es que nadie quiere considerarse una mala persona. Tampoco dicen que está haciendo cosas malas. Es por eso que todos podemos justificar nuestras malas acciones a los que nos juzgan.
Los manipuladores perversos narcisistas también quieren verse a sí mismos como buenas personas. Tienen una propensión a considerarse a sí mismos también como víctimas porque su autoimagen actual no puede manejar lo contrario.
Una negación de la realidad.
Además, admitir que hicieron algo malo equivaldría a admitir un fracaso o una renuncia. Esto es algo que los atacantes nunca harán. En sus mentes hay un choque fuerte entre el desorden de personalidad, una necesidad de control y el ciclo de abuso por el otro.
Luego se vuelven delirantes al tratar de justificar sus acciones. O finge que estás equivocado. Esto les permitirá sentirse en paz con los actos malvados que han cometido. Al hacer esto, salen de la realidad que sería insoportable para ellos. Crean su propia realidad.
Piénsalo por un momento. Su manipulador pervertido narcisista ciertamente ya le ha presentado excusas descabelladas para su comportamiento.
Es posible que haya escuchado que él minimiza lo que hizo, inventa cosas que hizo para justificarse a sí mismo, o incluso dice que “se lo merecía” porque hizo algo que él no hizo. no me gustó.
Todas estas cosas son las llamadas aberraciones con el fin de seguir considerándose a sí mismas como una buena persona.
Es por eso que es tan difícil hacer que un manipulador narcisista perverso admita que está haciendo cosas incorrectas, incluso si hay evidencia. Si hay daños visibles y pruebas serias, pueden admitir que han estado equivocados durante un corto período de tiempo. Pero cuando desaparece la evidencia, será culpa tuya nuevamente.
Al arruinar su reputación y preocuparse por la de ellos, se aseguran de que otros les aseguren su derecho.
Es por eso que nunca debes esperar que un abusador admita sus errores a la larga. Y nadie puede cambiar sin reconocer sus errores y errores.
Esta es también la razón por la cual no debes tratar de cambiar un manipulador perverso narcisista.
Ni para obligarlo a admitir los hechos. Si estás con un manipulador perverso narcisista, la mejor solución para ti es irte y desconectarte de él, tan pronto como notes comportamientos de negación.
SUS TÉCNICAS:
1.- La cortina de humo
La cortina de humo es una táctica manipuladora que puede resumirse con las frases: “eso no pasó”, “eso no fue así”, ¿estás loco/idiota?”.
2.- Proyección
A veces realizada de forma inconsciente, la proyección es un mecanismo de defensa utilizado por los manipuladores para desplazar la responsabilidad de su conducta y sus consecuencias, atribuyéndola a otra persona.
3.- Conversaciones sin sentido
Si vas a tener una discusión con un manipulador o narcisista, debes estar preparado para que tu mente explote en un mar de sin sentidos.
Utilizarán una gran variedad de estrategias, conversaciones circulares, hechos pasados, cortinas de humo y ensaladas de palabras para confundirte
4.- Generalizar y descalificar
Ser narcisista no implica ser inteligente. De hecho, muchos de ellos son intelectualmente perezosos.
Por ejemplo, en vez de sopesar distintos puntos de vista, prefieren generalizar y hacer afirmaciones vagas y universales. O quizás tildarte de loco o ignorante, para así desestimar todos tus argumentos u opiniones.
5.- Tergiversar pensamientos y sentimientos hasta el absurdo
Un manipulador será capaz de convertir tus sentimientos en un defecto de carácter que evidencie tu propia irracionalidad.
Son expertos en tejer “cuentos chinos” y replantear lo que estás diciendo para que suene absurdo.
6.- Críticas destructivas disfrazadas de falsa bondad y la perfección imposible
Las personalidades manipuladoras solo quieren que tú mejores. Te “ayudan” a ser feliz, o a estar más satisfecho contigo mismo.
Para ello, y por tu bien, te harán ver todos tus errores y elevarán el listón hasta el infinito.
7.- Evasión al pasado
A esta técnica me gusta llamarla “¿qué pasa conmigo?, que…” y consiste en trasladar la discusión actual a otra pasada con ciertas similitudes en la que ellos fueron, supuestamente, la víctima.
De esta forma tu error pasado, o el de otras personas, justifica todos sus comportamientos.
8.- Amenazas encubiertas
Cuando los manipuladores y narcisistas sienten amenazada su sensación de superioridad, tratarán de hacer frente a los desacuerdos desviando la atención sobre su derecho a discrepar y las consecuencias de no estar de acuerdo con ellos.
Serán propensos a plantear situaciones de “o con ellos o en su contra”, “o haces esto o yo haré esto otro” y diversos ultimátums.
9.- Insultos
Quien se oponga a un narcisista creará una herida en su coraza de superioridad, lo que a su vez generará un ataque de rabia. Sin argumentos y desprotegido, el manipulador tratará de recuperar su confianza denigrando y descalificando a la otra persona.
Los insultos brotarán de forma rápida y fácil, ya se refieran a su inteligencia, apariencia o comportamiento, pero todos destinados a invalidar el punto de vista del contrario.
10.- Condicionamiento destructivo
La gente tóxica trata de condicionar los planes a su presencia y persona, haciendo que si alguien quiere prescindir de ellos, las celebraciones, vacaciones o cualquier tipo de plan se arruine o cancele.
11.- Hacerse la víctima y difamar al contrario
Cuando los manipuladores no pueden controlar la forma en que les ven los demás, optan por argumentar que existe un complot o campaña de desprestigio hacia su persona.
Él no es como realmente le pintan, sino que los demás le están difamando haciéndole quedar mal para que pierda sus amistades.
12.- Bombardeo de amor y socavo de la autoestima
La estrategia es siempre la misma: cuando conocen a alguien de su interés, tratarán de complacerla mostrándose como la pareja o el amigo ideal.
El más divertido, comprensivo y simpático de cuantos conoces. Conforme ascienda y coja confianza, comenzará a devaluar y señalar los defectos de otras amistades que considera rivales.
13.- Falsa confianza
Cuando alguien hace hincapié en describirse como “una buena persona” o “alguien digno de confianza y credibilidad”, sé cuidadoso.
14.- Triangulación
Aunque la triangulación puede ser un buen sistema para contrastar opiniones y escapar de una persona tóxica, el narcisista también sabe usarla en su beneficio.